Una nueva Estrella rutilante SWH

Busco, rebusco y vuelvo a buscar unas pocas palabras que quieren sER ese calor de respuesta. Pero hoy no lo consigo.

Así que me lanzo al vacío y dejo que mi mirada se eleve lejos, bien lejos, para que se pierda y se convierta en partículas cósmicas que busquen nuestro Mar de Estrellas SWH.

Porque hoy es un día para lanzar esa mirada al cielo y ver que las estrellas también se ven de día, ¡Síiiiii!.

Sé que tenéis bien abiertos vuestros ojos, ¡¡¡muy, muy abiertos!!!, porque hoy escribo para tí Victoria (y un poquito para tí también Angélica…):

Una Victoria que atardece en Marzo.

Un amor que se hace Luz en Enero.

Una tormenta perfecta en Mayo.

Una mirada que retuerce un abrazo fuerte en Febrero.

Un soplo de manos arriba en una foto que se hace mural SWH en Abril.

Un adorno navideno que encierra los Pilares del Cielo en un sER difERente en Agosto.

Unas palabras resilientes que marcan el Norte en Octubre.

Un pedacito de alma titilante en Septiembre.

Una cicatriz que diferencia lo esencial de lo invisible en Julio.

Un paso de aliento que lanza aviones de papel en Noviembre.

Una lágrima expectante en Junio.

Una nueva Estrella Rutilante en Diciembre 2017.

 

Mi mirada hace rato que se ha convertido en un haz de Luz que llega. Veo ese Mar de Estrellas.

Y vosotros, ¿lo veis?, ¿veis todas esas Estrellas?, allí están, titilantes, rutilantes…, ¡expectantes!, diciéndonos, entre nubes y cristales, que cuando se apaguen las luces, ellas…ellas SIEMPRE seguirán despiertas.

 

Ya sólo queda preguntarse: ¿Y ahora qué?

¡ArdER la Vida con todas las fuERzas!

Un beso enooooorme con sabor a cientos de miles de estrellitas todas juntitas y difERentes.

 

Para Victoria y Angélica.

(Y en recuerdo a Niko y Laura un poquito también).

Leave A Comment